sábado, 20 de agosto de 2011

La ilusión es una escalera sin barandilla

as sentido alguna vez una sensación como de caer al vacío al pensar en una persona? 

Es una sensación extraña: por un lado de gusta sentirla, porque es una descarga de endorfinas a nuestro cerebro, que decidimos llamar flechazo.

Pero por otro lado te deja una sensación de distancia, al no poder despedirte cada noche con una caricia, con un abrazo, con un beso...

Creo que enamorarse es una prueba continua a estos instintos, a esos momentos que tu mente no responde a la razón, sino al estímulo que produce esas preciadas endorfinas.



Guiados por esa necesidad, en ocasiones elegimos a la pareja equivocada, y cuando ya no es capaz de producir esa sensación inicial, decimos que la otra persona ha cambiado y que no la vemos como al principio.

Y en parte tendrían razón. Si la pareja no es capaz de evolucionar a la misma velocidad e intensidad, se desestabilizará la pareja. Es como meter un vaso de cristal muy caliente en agua helada, se fragmentaría en mil pedazos.



Pero, es no es malo dejarse llevar por la pasión! Demostrarse el cariño es algo diario, y no sólo besarse y decir te quiero. Muchas veces unas palabras de animo, un abrazo mientras duerme, no hace falta decir nada salvo mirarse a los ojos... eso es pasión!

Me da envidia ver a parejas de ancianos paseando de la mano, porque aunque hayan pasado mil dificultades, son felices estando simplemente juntos.

... reflexiones de una alondra

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